La vida tiene mucho que ense�arnos, pero tambi�n la muerte. No sabemos apenas nada sobre ella, solo que tarde o temprano, absolutamente todos, recibiremos su visita y cumpliremos de manera muy puntual nuestra ya agendada cita. Pascual lo sabe muy bien, acaba de morir, o m�s bien, acaba de ser asesinado. Ahora, estupefacto, contempla su maltrecho cad�ver, mientras espera que algo o alguien le diga qu� es lo que viene a continuaci�n. Sin embargo, parece no haber ni una sola respuesta a tanta pregunta e invisible a cualquier ojo, su existencia se limita a contemplar como los dem�s siguen con sus vidas. �Ser� esto todo lo que le espera durante el resto de la eternidad? �O es que su impune asesinato se ha convertido en un asunto pendiente que no le deja avanzar? No tiene otro camino que tratar de averiguarlo.